Si bien todos lanzamos algún gas de vez en cuando —de hecho todos los humanos liberan 1/2 litro de flatulencias cada 24 horas—, existen maneras de disminuir su frecuencia e intensidad. Ten cuidado con estos 7 alimentos que te provocarán flatulencias muy olorosas y vergonzosas.
7. Repollo
Este exquisito vegetal, que además es bajo en calorías, parece ideal para una buena dieta, esto debido a su alto contenido de nutrientes. Pero si vas a almorzar repollo, mejor cancela tus planes para después. El repollo contiene trisacarido rafinosa, una sustancia que tu estómago e intestinos no son capaces de digerir, por lo cual su putrefacto olor saldrá en ese gas que intentas que pase desapercibido. .
6. Goma de mascar libre de azúcar
Si te gusta la goma de mascar y quieres evitar que te engorde, existen varios tipos con endulzante artificial, pero esa dulzura trae su precio. La goma de mascar libre de azúcar suele traer sorbitol, un edulcorante que lleva a un exceso de gases. Si consumes demasiado, tus pedos sonarán orquesta de percusión interpretando a Wagner. 5. Cebolla
Si te gusta la goma de mascar y quieres evitar que te engorde, existen varios tipos con endulzante artificial, pero esa dulzura trae su precio. La goma de mascar libre de azúcar suele traer sorbitol, un edulcorante que lleva a un exceso de gases. Si consumes demasiado, tus pedos sonarán orquesta de percusión interpretando a Wagner. 5. Cebolla
5. Cebolla
Ideal para aliñar o complementar cualquier comida, pero mejor dejarla para días en que no tienes una cita, ya que no solo provoca mal olor desde tu aliento, sino que también en los gases que salen por debajo. La cebolla causa fuertes flatulencias y también es una verdadera fábrica de gases que no tendrán piedad a la hora de «perfumar» una habitación o, peor, un restaurante completo.
4. Frijoles
Todos sabemos que los frijoles son la receta exacta para un día lleno de gases, esto se debe a su alto contenido de oligosacáridos que el intestino no puede digerir. Al final, son las bacterias las que atacan este elemento, generando esos pedos que se sienten a kilómetros de distancia, tanto por su olor como por su sonido.
3. Lácteos si eres intolerante
Algunos niños y muchos adultos sufren de intolerancia a la lactosa, es decir que carecen de la lactasa, enzima que el cuerpo requiere para procesar el azúcar natural de la leche. Quizá no sabes que eres intolerante pero, si tras consumir yogur, queso, leche y hasta helados, tus gases parecen bombas de olor, es hora de hacer cambios en tu dieta.
2. Bebidas carbonatadas o gaseosas
Es sabido que tomar una bebida con gas hace que eructes fácilmente, pero sus efectos no solo se quedan en los gases que salen por tu boca. La fructosa, el principal azúcar añadido a las bebidas con gas, no es digerido fácilmente por el cuerpo y, al estar tan concentradas sus burbujas, resultan en esos pedos hediondos y largos que parecen salidos de un saxofón, imposibles de ignorar por el resto.
1. Granos integrales
Son más sanos que los procesador y están llenos de fibra, lo que es ideal para mejorar la digestión, pero alimentos con granos integrales como el trigo, avena, cereales y hasta pastas, tienen un efecto secundario. Al ser tan buenos para la digestión, hacen que tu cuerpo absorba rápidamente lo bueno y elimine lo malo. Te conviertes en un reloj a la hora de ir al baño, pero entremedio vas soltando las peores flatulencias que puedas imaginar, capaces de espantar a cualquiera.
Podríamos seguir con decenas y decenas de alimentos, pero seguramente ya consumiste hoy alguno de estos alimentos que provocan gases asquerosos y potentes.
Queda resignarse, tratar de que tus pedos no queden en espacios cerrados, como ascensores y de aparecer en un momento inapropiado, culpar a otro y ya...
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